Ara romana

La Ara es un pequeño altar de piedra romano que tiene la forma de pedestal o de columna de sección cuadrangular. El pueblo galaico-romano (s. I la. C-s. V d. C) la utilizó para comunicarse con él al otro lado, de ahí que realizaran sobre ella ofrendas de líquidos y vegetales dedicados a sus dioses y mismo sacrificios de animales.

Este pequeño altar está coronado por una cavidad en la parte superior que recibe el nombre de foculus, un espacio cóncavo en el que se quemaban las ofrendas. En una de las caras se observa los restos de una inscripción que fue repicada.

Gracias a una placa de bronce descubierta en Viana en el año 1728 conocemos el nombre del pueblo indígena que pudo habitar esta comarca antes de la llegada de los romanos: los Alterniaicinos. También el nombre de una de sus divinidades:

Aegiamuniaeco. Nicolás Tenorio (1904) creía que la actual Viana do Bolo era la Volobria que cita el geógrafo griego Claudio Ptolomeo (100-170 d. C) o bien la Volobriga a la que se refiere Manuel Huerta (1736).
 
Se ignora el contexto arqueológico en el que apareció esta pieza, de ahí que no podamos decir nada sobre las circunstancias del hallazgo.